Sólo el azar, la necesidad y Norberto Pinti, un director de teatro como los de antes, ecléctico, simpático, tramposo y mujeriego, pueden hacer una selección tan variopinta y acertada para formar una compañía de variedades, de la que él, será el maestro de ceremonias.
Un espectáculo en el que nunca puede faltar una primera vedette con desparpajo, picardía, talento y belleza. Cualidades que posee de sobra la despampanante Miranda Vega. Será la atracción principal a la que acompañarán:
Una cómica que no se reconoce porque
ha perdido el don de la risa.
Una bailarina con síndrome de
quítate tú pa ponerme yo.
Un alocado coreógrafo italoalbaceteño
¿amigo de la Carra?
y un domador de caniches
reciclado en cantante.
Juntos llevan 20 años paseando sus cuerpos, maletas y espectáculo de plaza en plaza, hasta que les anuncian el cese de actuaciones,
el fin de la gira, porque lo suyo ¡ya no se lleva!.
¿Renovarse o morir? Lo tienen claro, porque hay que seguir viviendo, pagando facturas y porque
no saben ni quieren saber de otro oficio.
Son actores y pueden "cambiar de registro", aunque por ahora no lo tienen nada claro.
.-Ya la tengo, se llama “Comedia sin título”,
anuncia el director.
.-¿Sin título?¿Y por qué no se lo ponemos?
.-No se puede hacer algo que no lleva título.
.-¿Veis esta carretera? Sólo nos queda esto “tirar para adelante”. Vamos a hacer lo que nos piden, teatro teatro… Escuchad:
“No voy a abrir el telón para alegrar al público con un juego de palabras, ni con un panorama donde se vea una casa en la que nada ocurre y a donde dirige el teatro sus luces para entretener y haceros creer que la vida es eso” “Venís al teatro con el afán único de divertiros y tenéis autores a los que pagáis, y es muy justo, pero hoy el poeta os hace una encerrona porque quiere y aspira a conmover vuestros corazones enseñando las cosas que no queréis ver, gritando las simplísimas verdades que no queréis oír” “¿Por qué hemos de ir siempre al teatro para ver lo que pasa y no lo que nos pasa?”
Todos se miran, no entienden nada.
Vienen de otro mundo, donde el contenido
de las luces brillan al son de la música y el entretenimiento de los personajes. Cuando se apagan, el silencio y la soledad acompañan, tantas veces, a las personas que los encarnan.
Han elegido y decidido sumergirse en Lorca, al que van entendiendo, sintiendo y siendo los transmisores de la realidad que hace pensar, que nos despoja de artificios, mueve nuestras conciencias y remueve y renueva nuestras vidas.
Sabemos que lo han conseguido cuando pasan de juntar palabras en una primera lectura a dar sentido y profundidad a un texto que ya es suyo y al decirlo, al sentirlo, nos emocionan. Ya se han reciclado, ya están preparados para estrenar, pero… nunca lo harán con esta obra y su autor, ya no interesa.
El dinero manda y los dueños del teatro les avisan que tienen que volver al de entretenimiento,
al de la realidad transformada que anestesia
las conciencias y nos impide saber y sentir
nuestras miserias. La historia se repite y
les/nos devuelve al punto de partida.
La última Tournee es la historia de los actores,
del teatro, los sueños, envidias, religión,
precariedad, decadencia, mentiras,
frustraciones, amor, realidad…
En abril hizo mutis por el Foro entre canciones y aplausos, dejando un reguero de risas, sonrisas y carcajadas tan necesarias siempre.
Teatro, cine, series, televisión, literatura…
entrar en el universo Sabroso siempre es una aventura ética y estética, una forma de ver
y de entender la vida que emociona, divierte,
deja poso. Que te pasea por la ironía, el cinismo,
la crítica, la empatía, el cambio, la reflexión.
Siempre,
Felix Sabroso Cruz,
ME VUELVES LORCA. P.D.:¿1992? nos unió y llevamos caminando "al lado" desde desde entonces como compañeros, vecinos y amigos. Ese que siempre es y está sin necesidad de ocupar mi espacio físico, porque pensarte es tenerte.Te nacieron con un master en solidaridad, empatía, amistad, respeto, educación, generosidad que te han convertido en una de las mejores personas que he conocido. Y como gran creativo que eres “su poquito” de loco, profundo, superficial, divertido, caótico, estricto, intenso, cabezota, torturado, contradictorio, formado, informado, culto... te posee. A tu lado he aprendido muchas cosas y me has abierto a mundos, para mí, inexplorados.
El de mis afectos sólo me permitiría ser indulgente con un amigo desde el silencio.
Si
me atrevo a escribirte es porque nunca me dejas indiferente y siento
que sigues igual de vivo, pero mucho más maduro y cierto, que cuando te
conocí.
Sigue creando, porque te quedan muchas cosas por decir y muchas reflexiones y sonrisas que provocar.
El día que recibas “ese premio”,
que ya tenías que haber recibido,
invítame, quiero estar a tu lado
y mirarte a los ojos.