Y UNA CANCIONCILLA PARA DESENGRASAR...
Te diré, entre tú y yo,
que me dan miedo las tormentas,
que ahora veo que una se acerca,
que en el cielo hubo un temblor.
Y sólo pienso en escapar,
esto se ha puesto muy feo,
tuve un juicio contra reo
y sé que me condenarán.
Desde La Lloca hasta El Musel
te busqué y no te encontraba,
y cuando nos vimos las caras
me buscabas tú también.
Y ahora que sigues aquí
cómo no vas a cansarte
si de miércoles a martes
ya estoy harto yo de mí.
Me decías, lo que media
entre tú y tu soledad
es un trecho que no puedo abarcar.
Yo le preguntaba al cielo,
sin disimular el miedo,
cómo voy a vivir
cuando te canses de mí,
cuando te canses de mí.
Y qué más da si esto es el fin,
yo trato de matar el tiempo
y entre tanto lo que el tiempo
intentará es matarme a mí.
Y estas líneas, ya lo ves,
son lo más desesperado
para tenerte a mi lado
que se me ha ocurrido hacer.
Y si me dejas que lo intente
sólo una vez más,
me odiarás secretamente
y para siempre jamás.
Que hacen falta, ay amor,
más de dos vidas enteras
para corregir siquiera
el más mínimo error.
Me decías, lo que media
entre tú y tu soledad
es un trecho que no puedo abarcar.
Yo me pregunté a mí mismo,
sólo a un paso del abismo,
cómo voy a vivir
cuando te canses de mí,
cuando te canses de mí, ay, de mí.
Me decías, lo que media
entre tú y tu soledad
es un trecho que no puedo abarcar.
Yo le preguntaba al cielo,
sin disimular el miedo,
cómo voy a vivir
cuando te canses de mí,
cuando te canses de mí.
que me dan miedo las tormentas,
que ahora veo que una se acerca,
que en el cielo hubo un temblor.
Y sólo pienso en escapar,
esto se ha puesto muy feo,
tuve un juicio contra reo
y sé que me condenarán.
Desde La Lloca hasta El Musel
te busqué y no te encontraba,
y cuando nos vimos las caras
me buscabas tú también.
Y ahora que sigues aquí
cómo no vas a cansarte
si de miércoles a martes
ya estoy harto yo de mí.
Me decías, lo que media
entre tú y tu soledad
es un trecho que no puedo abarcar.
Yo le preguntaba al cielo,
sin disimular el miedo,
cómo voy a vivir
cuando te canses de mí,
cuando te canses de mí.
Y qué más da si esto es el fin,
yo trato de matar el tiempo
y entre tanto lo que el tiempo
intentará es matarme a mí.
Y estas líneas, ya lo ves,
son lo más desesperado
para tenerte a mi lado
que se me ha ocurrido hacer.
Y si me dejas que lo intente
sólo una vez más,
me odiarás secretamente
y para siempre jamás.
Que hacen falta, ay amor,
más de dos vidas enteras
para corregir siquiera
el más mínimo error.
Me decías, lo que media
entre tú y tu soledad
es un trecho que no puedo abarcar.
Yo me pregunté a mí mismo,
sólo a un paso del abismo,
cómo voy a vivir
cuando te canses de mí,
cuando te canses de mí, ay, de mí.
Me decías, lo que media
entre tú y tu soledad
es un trecho que no puedo abarcar.
Yo le preguntaba al cielo,
sin disimular el miedo,
cómo voy a vivir
cuando te canses de mí,
cuando te canses de mí.
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