Hugo Chávez no era Franco, situado en la primera división de los Mussolini o Hitler. Su caso entronca más bien con el caudillismo latinoamericano del siglo XIX y principios del XX. Fue un soñador, como le definió el uruguayo José Mujica, que pudo soñar cuando el precio del petróleo cabalgó por encima de los 100 dólares el barril y el maná del dinero caía sobre Venezuela.
Léelo, un interesante análisis de Ramón Lobo
No hay comentarios:
Publicar un comentario