Es una tarta muy buena porque se come sin querer y si está fresquita mucho mejor.
¿cómo la hacemos? pues es muy fácil.
Lo primero es batir textura merengue ( es decir que les das la vuelta y ni se mueven, ni se caen ), 6 claras de huevo con 100 gr. de azúcar. Éstas son de mercadona, que ya vienen sin la yema.
Puedes hacerlo manualmente...o mecánicamente. Yo he optado por ésta vía.
Mientras pones a hidratar de 8 a 10 hojas de gelatina (según la marca) en un poco de agua, durante 5´ más o menos.
En otro cuenco mezclas 200 gr. de leche condensada...
con 600 gr de queso.
y unas gotitas de esencia de limón...
Quitamos el agua de la gelatina, la escurrimos y la disolvemos metiéndola en el microondas unos segundos.
MUY IMPORTANTE... cuando está disuelta la movemos bien para que se licue totalmente. Añadimos un poco de la mezcla anterior (queso y leche condensada) a la gelatina (el frío va al calor) y la movemos, añadimos otro poco y volvemos a mover hasta que se fusione bien. Entonces pasamos esta mezcla al resto de lo queda y añadimos el merengue. Con movimientos envolventes y ayudados por una lengua...
lo dejamos niquelao.
Cogemos unas galletas que nos gusten...
las bañamos en licor de limón
volcamos sobre ellas la crema que acabamos de hacer y el resultado lo metemos en la nevera hasta el día siguiente.
Éste día, el siguiente, invitamos a unas amigas a desayunar....
les ponemos un trozo de tarta...
y por su cara sabrás el resultado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario