unas monjas de Granada han estado beneficiandose economicamente de la comida para los pobres durante 10 años. Cogían comida de la beneficencia, esto es, del banco de
alimentos llevándosela totalmente gratuita siendo en teoría para gente
en la indigencia y sin recursos, pero luego esta comida era usada en la
pensión que sí cobraban por la comida y la pecnortación donde ellas
están.
y digo yo... señor Dios, señor Dios, ¿a dónde vamos a llegar?
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