En 2013 se publicó George Orwell: A life in letters, George Orwell: una vida en cartas.
En él encontramos esta carta a un lector.
En 1944, tres años
antes de plasmar "1984" y cinco años antes de su publicación, George
Orwell escribió una carta detallando la tesis de su gran novela. La
carta advierte sobre el surgimiento de políticas de estado totalitarias,
que "dirán que dos y dos son cinco".
Para Noel Willmett
10a Mortimer Crescent NW 6
Estimado Sr. Willmett,
Muchas gracias por su carta. Usted pregunta si el totalitarismo, el culto a la personalidad etc. están realmente en avance y ejemplariza el hecho de que aparentemente no están en aumento en este país ni en los EEUU.
Debo decir que creo, o temo, que tomando al mundo como un todo, estas cosas están en incremento. Hitler, sin duda, desaparecerá pronto, pero solo a expensas del fortalecimiento de (a) Stalin, (b) los millonarios anglo-americanos y (c) toda suerte de fuhrers mezquinos del tipo de Gaulle. Todos los movimientos nacionales en todas partes, aun aquellos que se originan como resistencia a la dominación alemana, parecen tomar formas no democráticas, agruparse alrededor de algún fuhrer superhumano (Hitler, Stalin, Salazar, Franco, Gandhi, De Valera; son todos ejemplos diversos). y adoptar la teoría de que el fin justifica los medios. En todas partes los movimientos mundiales parecen estar en la dirección de economías centralizadas, las cuales pueden estar hechas para funcionar en un sentido económico pero no están organizadas democráticamente y tienden a establecer un sistema de castas. Con esto van los horrores del nacionalismo emocional y una tendencia a no creer en la existencia de la verdad objetiva porque todos los hechos tienen que coincidir con los dichos y las profecías de un algún fuhrer infalible. La historia en un sentido ya ha dejado de existir, i.e., no hay tal cosa como una historia de nuestro propio tiempo que pudiera ser universalmente aceptada, y las ciencias exactas son puestas en peligro de extinción tan pronto la gente cesa en apoyar la necesidad militar como debiera. Hitler dice que los judíos comenzaron la guerra, y si él sobrevive, eso será la historia oficial. Él no puede decir que dos y dos son cinco porque, para los propósitos de, digamos, balística, tienen que ser cuatro. Pero si la clase de mundo que temo llega, un mundo de dos o tres grandes superestados que no puedan conquistarse el uno al otro, entonces dos y dos serían cinco si el fuhrer así lo quisiera*. Eso, hasta donde puedo ver, es la dirección en la cual nos estamos moviendo verdaderamente, aunque, claro, el proceso es reversible, como la inmunidad comparativa de Bretaña y EEUU. Digan lo que digan los pacifistas etc. pudiéramos decir, que no hemos ido hacia el totalitarismo todavía y esto es un síntoma esperanzador. Creo muy profundamente, como expliqué en mi libro "El León y el Unicornio", en el pueblo inglés y en su capacidad de centralizar su economía sin destruir la libertad al hacerlo. Pero uno deber recordar que Bretaña y EEUU no han sido realmente puestos a prueba, no han conocido la derrota o el sufrimiento severo y hay algunos malos síntomas que le hacen contrapeso a los buenos. Para comenzar, está la indiferencia general al decaimiento de la democracia. ¿Se da cuenta usted, por ejemplo, que ninguno en Inglaterra menor de 26 ahora tiene voto y que en este punto, hasta donde uno puede ver, a la gran masa de gente de esa edad le importa un carajo? Segundo, está el hecho de que los intelectuales son más totalitarios, en perspectiva, que la gente común. En conjunto, la "inteligentsia" inglesa se ha opuesto a Hitler, pero sólo al precio de aceptar a Stalin. La mayoría de ellos están perfectamente listos para métodos dictatoriales, policías secretas, falsificación sistemática de la historia*, etc. mientras tanto sientan que eso está de nuestro lado. Ciertamente la afirmación de que no tenemos un movimiento fascista en Inglaterra significa enormemente que la juventud, en este momento, busca a su fuhrer en otra parte. Uno no puede estar seguro de que eso no cambiará, ni puede uno estar seguro de que el común de la gente no pensará, de aquí a diez años, como lo hacen los intelectuales ahora. Espero que no**. Hasta confío en que no lo harán, pero de ser así, será a costa de una gran lucha. Si uno simplemente proclama que todo es para lo mejor y no señala los síntomas siniestros, uno está meramente ayudando a traer el totalitarismo más cerca.
Usted también pregunta, que si ya que pienso que la tendencia mundial es hacia el fascismo, entonces ¿por qué apoyo la guerra? Es una elección entre males, supongo que cercanamente es así con todas las guerras. Sé suficiente sobre imperialismo británico como para que no me guste, pero lo apoyaría en contra del imperialismo Nazi o Japonés, como el menor de los males. Similarmente, apoyaría a la USRR contra Alemania porque pienso que la USRR no puede, en integridad, escapar de su pasado y retiene bastante de las ideas originales de la Revolución, como para hacerla un fenómeno más esperanzador que la Alemania Nazi. Pienso, y he pensado siempre desde que la guerra comenzó, en 1936 o por ahí, que nuestra causa es mejor, pero tenemos que seguir trabajando en hacerla la mejor de todas, lo cual involucra crítica constante.
Suyo sinceramente,
George Orwell
George Orwell
* Profético en 1984
** Comparar con lo que dice en 1984: "Si hay una esperanza, escribió Winston, yace en los proles"
Nota: Salvo un par de giros idiomáticos que no se pueden traducir literalmente y algún que otro cambio en la posición de las comas (hay ligeras diferencias de uso entre el español y el inglés al respecto) la traducción es fiel al texto. Estuve a punto de intercalar algunas imágenes, pero la intención es presentar las palabras de Orwell en su contexto y tiempo, no en el mío. Ni siquiera me atreví a resaltar aspectos interesantes (para mi) con negritas.
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