El tiempo entre costuras es una novela de María Dueñas, que narra la vida de Sira Quiroga, una joven modista. El libro ha sido un éxito de ventas y Antena3 lo ha convertido en serie.
“Una máquina de escribir reventó mi destino”...
Es un libro que entretiene, previsible, muy para mujeres, bien escrito, documentado y tan lleno de historias que la curiosidad no te deja descansar hasta que lo terminas. Un culebron con todos sus ingredientes, buenos, malos, intrigas, pobreza, riqueza, viajes, países y lo que no puede faltar amor, pasión, abandono, decepción ... Y como no, con final feliz y el triunfo del amor.
Se digiere fácilmente, es muy visual, esta lleno de imágenes y cuando leí la última palabra pensé... Que buena película o serie de tv saldría de aquí.
Puse cara a cada personaje, pasión a cada beso y dolor en cada frustración. Puse nombre a los actores, imaginé localizaciones, vestidos, peinados... para todo, el libro da mucho de sí.
Hoy he avisado... Esta noche Harold, mi sillón y a ver la tele que estrenan Tiempo entre costuras.
Sólo con ver las primeras imágenes se nota el dinero y el esfuerzo de todo el equipo. No falta un detalle y es un lujo para la vista. La ambientación, vestuario, peluquería , maquillaje, iluminación, fotografía, localizaciones... Todo es perfecto, los protagonistas son bellos, el collage está montado y el culebrón está servido en bandeja de oro.
He mirado la tele sin pestañear, sin recordar el libro, entregada, entusiamada...
En éste capítulo una niña crece entre costuras, se echa novio al que abandona a las puertas del enlace, descubre el amor pasión, conoce a su padre biológico, de la pobreza pasa a la riqueza, emigra,
vive y ve las posibilidades del amor y de los amores diferentes, descubre el lujo y el desenfreno, se queda embarazada, es abandonada, robada y humillada, vuelve a la pobreza y el desasosiego, aborta y termina en un hospital... continuará.
¿Es o no es un culebrón? No le pueden pasar más cosas en un capítulo y todas de vital importancia. Sira ha vivido un tsunami emocional que ofrece unas posibilidades interpretativas de lujo para una actriz y al resto de los actores les pasa lo mismo. Entonces ¿por qué sus actuaciones son planas, están carentes de emoción y lo mismo les da que les da lo mismo ser abandonados, conocer a una hija o abortar?
La película es lenta, carente de ritmo, la dirección de actores es inexistente, son seres carentes de emociones, no les pasa nada, no hay fuerza ni pasión
en sus actuaciones. Si los momentos cumbres no tienen
intensidad dramática imagínate el resto.
¿Dónde está el director? Es una pena ver como el trabajo tan brillante de todo un equipo se queda en un bonito videoclip por ausencia de dirección.
Menos mal que al final del capítulo hay un Making-of en el que el director nos cuenta lo que no hemos visto, y el iluminador, cámara, producción, vestuario, maquillaje, peluquería... nos muestran como cada uno se apasiona con su trabajo, por qué deciden cómo y cuándo poner un vestido, cambiar un maquillaje o planificar un escenario idóneo.
Tenemos los mejores profesionales y envidio y echo de menos estar en un rodaje. Es como el amor si no lo vives, si no lo sientes, por mucho que te lo expliquen no te puedes imaginar como es.
Es un mundo aparte que produce vértigo y te aisla en una burbuja de convivencia, creatividad, buen rollo y felicidad.
Enhorabuena a todos por el trabajo y el esfuerzo y esperemos que los 10 capítulos restantes me devuelvan la emoción y anulen la decepción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario